miércoles, 20 de julio de 2011
Feng Shui Mental
... Hay un punto en tu vida, en el que te das cuenta: quién importa, quién nunca importó, quién no importa más, y quién siempre importará...
De modo que no te preocupes por la gente de tu pasado, hay una razón por la que no estarán en tu futuro...
Mental Feng Shui...!!!
Este es sin lugar a dudas uno de los mejores e-mails que me ha llegado, espero que funcione para ti y para mi.
UNO. Dale a la gente más de lo que esperan recibir y hazlo con alegría.
DOS. Cásate con un hombre/mujer con quien te guste platicar. Conforme envejeces tu sentido por conversar se enriquecerá como cualquier otro.
TRES.. No creas todo lo que oyes, no te gastes todo lo que tienes y no duermas todo lo que quieres.
CUATRO. Cuando digas 'te amo', dilo con un profundo sentimiento.
CINCO. Cuando digas 'lo siento' mira a la persona a los ojos.
SEIS. Está comprometido por lo menos seis meses antes de casarte.
SIETE. Cree en el amor a primera vista.
OCHO. Nunca te rías de los sueños de los demás. Las personas que no tienen sueños, no tienen mucho.
NUEVE. Ama profunda y apasionadamente. Puedes salir herido, pero es la única manera de vivir la vida plenamente.
DIEZ... En desacuerdos, pelea justamente. No digas nombres.
ONCE. No juzgues a la gente por sus familiares.
DOCE. Habla con calma y piensa rápido.
TRECE. Cuando alguien te hace una pregunta que tu no deseas contestar, sonríe y pregúntale 'porque quiere saber eso'.
CATORCE. Recuerda que un gran amor y grandes retos siempre envuelven un gran riesgo.
QUINCE. Di salud cuando oigas a alguien estornudar.
DIECISEIS. Cuando pierdas, no pierdas la lección.
DIECISIETE. Recuerda las tres R´s: Respeto por ti mismo; Respeto por los demás y Responsabilidad por todos tus actos.
DIECIOCHO. No permitas que una pequeña disputa lastime una gran amistad.
DIECINUEVE. Cuando te des cuenta que has cometido un error, toma inmediatamente acciones para corregirlo.
VEINTE. Sonríe cuando tomes el teléfono para contestar una llamada, la persona que llama lo podrá sentir en tu voz.
VEINTIUNO. Pasa algún tiempo solo.
martes, 5 de julio de 2011
Las mil canicas
Cuanto más envejezco, más disfruto de las mañanas del sábado.
Tal vez es la quieta soledad que viene por ser el primero en levantarse o quizá el increíble gozo de no tener que ir al trabajo...
De todas maneras, las primeras horas de un sábado son en extremo deliciosas.
Hace unas cuantas semanas, me dirigía hacia mi equipo de radio-aficionado, con una humeante taza de café en una mano y el periódico en la otra.
Lo que comenzó como una típica mañana de sábado, se convirtió en una de esas lecciones que la vida parece darnos de vez en cuando... déjenme contarles:
Sintonicé mi equipo de radio en banda de 20 metros, para entrar en una red de intercambio de sábado en la mañana.
Después de un rato, me topé con un colega que sonaba un tanto mayor.
Él le estaba diciendo a su interlocutor, algo acerca de "unas mil canicas".
Quedé intrigado y me detuve para escuchar con atención:
- Bueno, Tomás, -decía- de veras que parece que estás ocupado con tu trabajo.
Estoy seguro que te pagan bien, pero es una lástima que tengas que estar fuera de casa y lejos de tu familia tanto tiempo.
Es difícil imaginar que un hombre joven tenga que trabajar 70 horas a la semana para sobrevivir.
¡Que triste que te perdieras la presentación teatral de tu hija!
Continuó:
- Déjame decirte algo, Tomás, algo que me ha ayudado a mantener una buena perspectiva sobre mis prioridades.
Y entonces fue cuando empezó a explicar su teoría sobre las "mil canicas".
- Mira, me senté un día e hice algo de aritmética. La persona promedio vive unos 75 años, algunos viven más y otros menos, pero en promedio, la gente vive unos 75 años.
Entonces multipliqué 75 años por 52 semanas por año y obtuve 3.900 que es el Nº de sábados que, la persona promedio habrá de tener en toda su vida.
- No te distraigas y sígueme, Tomás, que voy a la parte importante.
Me tomó hasta que casi tenía 55 años pensar todo esto en detalle.
Continuó:
- Y para ese entonces, con mis 55 años, ¡¡ya había vivido más de 2.800 sábados!!
Me puse a pensar que si llegaba a los 75, solo me quedaban 1.000 sábados más que disfrutar. Así que fui a una juguetería y compré todas las bolitas que tenía.
Tuve que visitar 3 tiendas para obtener 1.000 canicas. Las llevé a casa y las puse en una fuente de cristal transparente, junto a mi equipo de radio aficionado.
Seguí escuchando atentamente:
- Cada sábado a partir de entonces, tomé una canica y la he tirado.
- Descubrí que al observar como disminuían las canicas, me enfocaba más sobre las cosas verdaderamente importantes en la vida. No hay nada como ver cómo se te agota tu tiempo en la tierra, para ajustar y adaptar tus prioridades en la vida.
Ahora déjame decirte una última cosa antes que nos despidamos y lleve a mi bella esposa a desayunar...
Esta mañana, saqué la última canica de la fuente de cristal y entonces me di cuenta de que si vivo hasta el próximo sábado me habrá sido dado un poquito más de tiempo de vida y si hay algo que todos podemos usar es un poco más de tiempo...
Me gustó conversar contigo, Tomás, espero que puedas estar más tiempo con tu familia.
Hasta pronto, se despide "el hombre de 75 años", cambio y fuera, ¡Buen día!.
Uno podría haber oído un alfiler caer al suelo en la banda cuando este amigo se desconectó.
Creo que nos dio a todos, bastante para pensar.
Yo había planeado trabajar en la antena aquella mañana y luego iba a reunirme con unos cuantos radio aficionados para preparar la nueva circular del club...
En vez de aquello, desperté a mi esposa con un beso, "vamos querida, te quiero llevar con los chicos a desayunar afuera". -
- ¿Qué pasa? - preguntó sorprendida.
- Nada; es que no hemos pasado un sábado juntos con los chicos en mucho tiempo.
(Anónimo)
Cuantas canicas vas a comprar tu?
Suscribirse a:
Entradas (Atom)